Modernización y flexibilidad van de la mano en el sector de la automoción. Ambos parámetros son necesarios para conseguir el ajuste rápido y eficaz a la demanda de los clientes. A estas dos variables, hay que sumar la customización. El cliente desea un vehículo completamente personalizado. Quiere el suyo propio, con todos sus detalles adaptados a su gusto. Es la fabricación bajo demanda.

La producción en serie de la automoción que desarrolló Henry Ford a principios del siglo XX ha ido evolucionando según las necesidades y peticiones del consumidor. Por aquel entonces, se fabricaban pocos modelos. Apenas había demanda. Sin embargo, a mediados de los 70, se empieza a gestar el término de flexibilidad en las líneas de fabricación. Parecía que la automatización era incompatible con la adaptabilidad.

Nada más lejos de la realidad. En el camino hacia esas líneas de producción totalmente flexibles en la automoción, los avances son constantes. Y en esa evolución que busca atender a toda la variedad de demandas de los clientes, los Vehículos de Guiado Automático (AGVs) tienen un papel protagonista.

Tradicionalmente, el montaje de la parte inferior del coche se realizaba sobre una línea fija y continua de rodillos. Al final de dicho proceso, la parte inferior del coche (powertrain) se unía con la parte superior (carrocería) en un punto llamado “boda” o “matrimonio”. En el camino hacia esas líneas de producción flexible, aparecen los AGVs para soportarlas y trasladarlas.

ASTI Mobile Robotics ha desarrollado el vehículo de guiado automático que mejor puede realizar ese proceso. Es flexible y preciso. Es un QuadBot que se traslada por la planta en las cuatro direcciones, con un sistema de motorización que se basa en dos motorruedas motriz-directriz y una capacidad de transporte de 2.000 kg de carga. A una altura de 550 mm, dispone de un sistema de transferencia de rodillos para recibir y dejar la carga.

Por lo tanto, “si en el medio del proceso tengo que añadir o quitar una nueva operación del conjunto, solo tengo que sumar o restar un AGV. Es fácil”, explica Vincent Bonamy, director de la Plataforma EasyBot de ASTI Mobile Robotics. En este sentido, la reorganización de la línea de proceso o línea de montaje resulta mucho más simple, al igual que la solución de un posible fallo en la cadena. De momento, es un paso intermedio hacia esa flexibilidad total. Las plantas de automoción mantienen las operaciones sobre la propia manutención, pero ahora con el QuadBot se permite “saltar de un puesto a otro con AGVs”.

Este nuevo vehículo automático de ASTI Mobile Robotics cuenta con una precisión de parada de 3 mm. “Seguridad perimetral de 360 grados con una restricción de hasta 5 metros con un alcance de 5 metros y gestionada automáticamente”, explica Bonamy. Es un AGV con sistema de guiado magnético y gestión de rutas, localización mediante tags de RFiD, que trabaja con el concepto de la plataforma EasyBot. “Eso implica que, tras una breve formación, el cliente domina la programación y tiene capacidad de rehacer el circuito a la medida de las necesidades de su producción, sin dependencia de terceros”, anota el director de la Plataforma EasyBot de ASTI Mobile Robotics.

Asimismo, el QuadBot está dotado un sistema de baterías de litio con carga por inducción y tiempos de recarga de un minuto. “No es necesario contacto, por lo que permite realizar operaciones de recarga mientras el AGV está haciendo tareas de carga y descarga de material”, explica Bonamy.

El nuevo vehículo de guiado automático de ASTI Mobile Robotics tiene dos tipos de comunicaciones. La comunicación WiFi de 5 GHz para toda la gestión de flota y recogida de datos. La comunicación de radiofrecuencia por banda estrecha permite una comunicación punto a punto con los puestos automáticos.

En definitiva, este QuadBot da respuesta a una forma de fabricación y montaje, a bordo de AGVs, y supone un avance en seguridad y transferencia de carga, con una gran capacidad de carga y precisión. El nuevo AGV se suma a la gama ‘EasyBot’ que ASTI Mobile Robotics tiene en el mercado: basic (hasta 250 kg), standard (hasta 600 kg), bidibot (entre 600 y 1.000 kg), omnibot (hasta 1.500 kg) y el tribot (hasta 10 tn).

ASTI Mobile Robotics

ASTI Mobile Robotics, transforming the future together, es una ingeniería de robótica móvil, dedicada al estudio, diseño, fabricación, puesta en marcha y mantenimiento de soluciones de intralogística automatizada. ASTI Mobile Robotics está especializada en soluciones de transporte interno, es decir, del movimiento de materiales y productos dentro de las empresas, mediante vehículos de guiado automatizado, llamados AGVs (Automated Guided Vehicles). La ingeniería cuenta con la gama más extensa del mercado y es experta en procesos y conectividad industrial.

ASTI Mobile Robotics forma parte del conjunto de empresas denominado ASTI TechGroup, todas ellas vinculadas a la tecnología y a la transformación digital. En la actualidad, está formado por cinco ejes que abarcan desde el desarrollo del talento en su fase más temprana hasta el desarrollo e implementación de robótica móvil.

ASTI Mobile Robotics es la empresa histórica de la compañía -fundada en 1982-. A esta empresa que es líder en Europa en su sector, se sumó dentro del grupo casi desde sus inicios una filial de distribución de tecnología para complementar la actividad de la matriz del grupo, denominada ASTI Technologies Distribution.
Asimismo, en los últimos meses de 2017, se crearon dos nuevos ejes en la compañía: ASTI Consulting Services -empresa creada para acompañar a las empresas en cualquier actividad relacionada con la mejora y la eficiencia industrial, con el objetivo de potenciar su competitividad y maximizar sus resultados- y ASTI Talent and Technology Foundation -fundación de ASTI que nace para abrazar en clave de oportunidad el cambio social de la transformación digital mediante dos palancas claves: el talento y la tecnología-.

El talento internacional de ASTI Tech Group, mayoritariamente perfiles técnicos, está formado por más de 210 personas provenientes de 9 nacionalidades y culturas distintas con un factor común: la motivación para desarrollar con energía y servicio al cliente un gran trabajo en equipo, dentro de un ambiente de respeto y humildad que permita cumplir la misión de incrementar la competitividad de sus clientes.