El actual mercado de las artes gráficas se encuentra en una etapa de transformación impulsada por la evolución tecnológica y por los cambios en las preferencias de los consumidores.
Corren tiempos pues, donde las empresas de la industria gráfica deben replantearse su modelo de negocio para seguir teniendo las cuotas de mercado que ya tienen alcanzadas diversificando en mercados nicho, donde quienes lleguen primero podrán disfrutar de un océano azul.
La estrategia del océano azul, es una teoría creada por W. Chan Kim y Renée Mauborgne, publicada en su libro homónimo en 2005. Esta idea sugiere la creación de nuevos mercados donde la competencia es escasa o inexistente, utilizando la diferenciación y la innovación como pilares fundamentales para establecer un espacio de oportunidades de negocio para las empresas.
La electrónica impresa es una tecnología con un atributo diferencial, que es su transversalidad, ofreciendo el potencial de innovación necesario para dejar atrás océanos rojos llenos de competencia y navegar en dirección a los océanos azules.
La industria gráfica en Cataluña es un sector importante dentro de la economía, con una fuerte tradición y una presencia significativa en distintos segmentos del mercado.
Probablemente, la industria de las artes gráficas no es consciente todavía de todo su potencial para facilitar el despliegue y la industrialización de la electrónica impresa. Esta tecnología puede ser una palanca para que jóvenes vean en esta industria una oportunidad para innovar ofreciendo nuevas soluciones e innovaciones en el mercado y suturar la falta de profesionales que ahora mismo tiene el sector por falta de atractivo respecto a otros.
Toda la experiencia en tintas y maquinaria de impresión digital, flexográfica o rotograbado, entre otros, es un diamante en bruto para hacer realidad el llevar la electrónica impresa del laboratorio al mercado.
Algunos ejemplos donde apuntan algunas brújulas pueden ser aquellos que marcan en dirección al proceso actual de fabricación de los billones de antenas RFID que se utilizan en alimentación o retail, tanto por identificación de producto, trazabilidad o antirrobo por su impacto negativo en el medio ambiente o en la impresión de celdas fotovoltaicas flexibles y transparentes que ayudarían a solucionar el gran problema que suponen los millones de paneles solares basados en el silicio que están llegando al final de su vida útil. Llegará un momento en que, por regulación, procesos productivos actuales serán insostenibles y aquellas empresas que hayan navegado parte del camino se encontrarán en ventaja competitiva.
Estamos pues, ante una ventana de oportunidad donde si somos capaces de encontrar sinergias entre industria gráfica y la tecnología, podremos posicionar a Cataluña en las coordenadas adecuadas para encontrar los océanos azules donde podrán ser referentes a nivel global en un futuro próximo.
Información de Eurecat.